Medio centenar de alumnos de la Universidad Politécnica de Cartagena, participantes en las XVII Jornadas de Patrimonio Histórico, han visitado las obras de restauración de la Iglesia de la Soledad de Cehegín, en la que han sido recibidos por el cura párroco de Santa María Magdalena, Serafín Campoy, y el concejal de Comunicación, Francisco Abril.
Durante la visita, el profesor de Arquitectura Técnica, Restauración y Rehabilitación de la universidad cartagenera Pedro Collado explicó a estos futuros profesionales que la iglesia originariamente era una ermita, construida a finales del siglo XVI y principios del XVII, y que gracias a un trabajo de campo realizado por estudiantes en el año 2002 hoy día se está restaurando.
Collado explicó el desarrollo de las obras y sus características, tales como su impactante policromía interior (gran colorido), realizada a mediados del siglo XX, la cual no se sabe aún si va a ser restaurada o se va a eliminar para volver al estado original del templo. Todos los zócalos se van a suprimir, ya que son impermeables y contribuyen a que aparezcan humedades en el interior. Además se van a eliminar las grietas y se van a limpiar los trampantojos.
Asimismo se han realizado zanjas en el perímetro de todas las columnas y de la fachada, para favorecer la respiración del edificio y la ausencia de humedades; y se va a mantener el suelo existente, de barro cocido, ya que está en perfecto estado. En cuanto al techo, se ha puesto un emplomado superior para evitar filtraciones de agua y se han sustituido todos sus elementos de madera. Por otro lado, va a restaurarse toda la carpintería interior que sea posible, siendo sustituida por nueva la 'irrecuperable'.
Estas obras, divididas en tres fases, y que tendrán una inversión de 655.404,79 euros, finalizarán con la intervención en la casa del santero, que será la futura sacristía, y en el patio de la iglesia, en el que se levantará un muro de contención para evitar que siga desplazándose.
Además, en estos trabajos se han observado numerosas peculiaridades, tales como las bóvedas, de un tipo especial; la ausencia de sillares, siendo los materiales utilizados en la estructura mayoritariamente yeso y mampostería; o el retablo principal y algunos secundarios, supuestamente traídos de otras iglesias durante la desamortización de Mendizábal. Además, han aparecido restos humanos que se encuentran en proceso de estudio para, en un futuro, ser trasladados al Museo Arqueológico para ser expuestos.
De momento ya se pueden apreciar la torre de la Iglesia de la Soledad, prácticamente restaurada, y las obras del tejado, en el que se está echando la nueva cubierta, por lo que, a buen ritmo y según lo previsto, continúan estos trabajos, los cuales devolverán al templo su esplendor perdido con el paso de los siglos.