La agrupación local de Cehegín por el Cambio se ha mostrado molesta por las alusiones que José Rafael Rocamora, alcalde de Cehegín, ha tenido en sus declaraciones «nada acertadas y poco rigurosas» en su comparecencia antes los medios para explicar el sistema de selección de los ordenanzas de los colegios.
Cehegín por el Cambio ha querido justificar su voto a favor de la anulación del proceso selectivo en la celebración del último pleno en el Ayuntamiento de Cehegín con los siguientes puntos:
*) Dice en el artículo que las bases se han redactado: “bajo el principio de justicia social considerando el tiempo inscrito en el desempleo así como la renta familiar”. Al respecto (lo que daría para una tesis) le indicamos que la suma de puntos de ambas variables podía ascender como máximo a 3 puntos (2+1); esto significa el 20 % de la puntuación máxima a conseguir en el total de la convocatoria, y el 60% de la entrevista personal semiestructurada (para esta prueba 5 puntos; ¡ahí es ná, lo del casting!. ¿Quieren aclararnos de una vez qué es eso de la semiestructurada?
*) Aluden con relación a la votación (le recuerdo que perdieron la misma por los votos en contra de los tres grupos de la oposición), dicen textualmente: “fue un puro teatro buscando rentabilidad política, porque las competencias en cuanto a las bases y su aprobación son del alcalde”. Nadie ha cuestionado, Sr. Rocamora, sus competencias; pero era obligación de nuestro grupo, en su responsable labor de oposición poner de manifiesto la monumental chapuza que ha supuesto el proceso selectivo, como así se puso de manifiesto en el aludido pleno; que por cierto de las muchas inquietudes y preguntas que se le formularon por nuestro grupo no contestó a ninguna. Se ve que le gustan más las declaraciones, sin que le hagan la contra, que los ámbitos institucionales.
*) Para teatro el de usted, que en un alarde de alargar el pleno, se puso más medallas – en cuanto a lo trabajador que es usted y a los sacrificios a los que se somete – que condecoraciones se dedican a un ejército entero, tras una guerra.
*) Afirman ustedes literalmente, con relación a las bases, lo siguiente: “están redactadas por juristas y el tribunal formado por funcionarios del ayuntamiento, no por miembros políticos”. Repase, Sr. Rocamora, los datos de todos los componentes del tribunal y verá que su afirmación no es del todo exacta. ¿Qué juristas van a redactar tan chapuceras bases? A otro perro con ese hueso.
*) Usted confunde la transparencia en la convocatoria (ya sería inaudito que esto lo ocultaran) con la verdadera transparencia en el proceso selectivo. Baste solamente un apunte: mire usted la “semiestructurada” (a ver si nos dicen de una vez eso qué es) ¿Fue pública? ¿Qué se evaluó en esta prueba?
*) Para terminar, vamos con otra de sus achacadas estulticias a la oposición: “deje de condicionar y torpedear la labor de gobierno…”. ¿Quiere decirnos cómo ha de ejercerse la oposición? Parece ser que sólo cuando votamos a favor de sus propuestas (suficientes ejemplos hay en los tres plenos habidos) somos responsable oposición, pero cuando votamos en contra – aunque sea con sobrados y fundados argumentos – nos atribuye el torpedear la labor del gobierno. ¿No sabe encajar las derrotas?