Siete socios de la empresa conservera Cofrutos, de Cehegín, serán juzgados el próximo jueves en la Audiencia Provincial acusados por el fiscal de un delito contra la Hacienda Pública por el que pide penas que suman 16 años de prisión y la entrega de 3,4 millones de euros supuestamente defraudados.
Señala el fiscal que los acusados, presuntamente, durante los primeros meses de 1992, planearon la venta de las acciones de la empresa a un grupo inversor integrado mayoritariamente por capital extranjero y que estaba interesado en comprar todas las acciones.
Se fijó un precio de las mismas que ascendía a 14,5 millones de euros, en el que estuvieron de acuerdo vendedores y grupo adquirente, pero «como quiera que la venta planeada suponía, a los efectos previstos en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas -dice el fiscal- una alteración en el patrimonio de los socios vendedores, éstos enmascararon la venta mediante la utilización de dos sociedades interpuestas».
De esta forma, añaden las conclusiones provisionales, «quedaba oculta gran parte del incremento de patrimonio y se disminuía aparentemente el importe de las cuotas que, por el concepto del Impuesto, correspondería a cada uno de los socios en el ejercicio de 1992».
Esas empresas de conveniencia fueron Arpe Comercial, S.L., a la que vendieron las acciones con un precio de 4,5 millones de euros, empresa que, a su vez, las vendió, dos días después, a la firma holandesa Forton B.V., al precio de 4,8 millones de euros.
Finalmente, esta última «vendió las acciones al grupo inversor que se había interesado con anterioridad por la adquisición y que se constituyó formalmente el mismo día 3 de agosto de 1992 como mercantil con el nombre de Sociedad Inversora Cofrutos, S.A., fijándose el precio en 14,5 millones de euros».
Fuente: abc.es